Retrasos en la nómina: cuándo puedes romper el contrato y cobrar indemnización
¿Sabías que puedes romper tu contrato y cobrar indemnización si tu empresa se retrasa habitualmente en pagarte la nómina? Desde abril de 2025, una reforma del Estatuto de los Trabajadores establece nuevos derechos frente a impagos salariales. Te contamos en qué casos puedes actuar y cómo reclamarlo legalmente.
Desde el 3 de abril de 2025, la Ley Orgánica 1/2025 ha reforzado la protección de los trabajadores ante los impagos o retrasos en el pago del salario. Esta reforma modifica el artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores y permite al empleado extinguir su contrato con derecho a indemnización por despido improcedente cuando el empleador no cumple de forma reiterada con sus obligaciones salariales.
Se considera “retraso” cuando la empresa paga la nómina con más de 15 días de demora respecto a la fecha habitual. Si esta situación ocurre en seis meses distintos a lo largo de la relación laboral, aunque no sean consecutivos, o si se adeudan tres mensualidades completas en un año, el trabajador tiene derecho a solicitar la extinción indemnizada del contrato.
¿Qué consecuencias tiene para el trabajador?
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Derecho a percibir la misma indemnización que si se tratara de un despido improcedente.
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Posibilidad de romper la relación laboral sin perder el derecho a paro.
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Reconocimiento judicial de que el incumplimiento es culpa del empleador, no del trabajador.
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Mayor protección frente a situaciones de vulnerabilidad económica derivadas de impagos.
¿Cómo se reclama?
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Reunir pruebas del incumplimiento: nóminas impagadas, justificantes bancarios o correos.
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Contactar con un profesional para valorar el caso y redactar la demanda.
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Presentar demanda ante el juzgado de lo social solicitando la extinción del contrato.
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Mantener la relación laboral hasta que el juez dicte sentencia, salvo que se acuerde una suspensión previa.
Esta reforma otorga a los trabajadores una vía clara y efectiva para actuar frente a incumplimientos que antes quedaban en un terreno poco definido. A su vez, obliga a las empresas a gestionar con rigor el pago de salarios, ya que cualquier incumplimiento reiterado puede derivar en la pérdida del empleado y en una indemnización importante. Para pymes y autónomos, esta norma implica redoblar la atención en la gestión laboral y financiera, dado que los márgenes de error en el pago de nóminas ahora tienen consecuencias legales directas.
Conclusión
La reforma del artículo 50 supone un avance relevante en la defensa de los derechos salariales de los trabajadores. Establece criterios objetivos frente a los impagos y obliga a las empresas a ser más rigurosas. Una medida necesaria para garantizar la confianza y la estabilidad en el ámbito laboral.
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