Diferencias entre leasing y renting, ¿Qué es mejor?
Existen alternativas como el leasing o el renting que pueden resultarte muy interesantes por sus beneficios y características. Aunque presentan similitudes las diferencias entre el leasing y el renting son muchas

¿Qué es el leasing?
El leasing es un tipo de financiación que consiste en alquilar un bien mueble o inmueble con la posibilidad de terminar comprándolo cuando el contrato llegue a su fin. Cuando esto sucede, el beneficiario tiene derecho a llevar a cabo la compra por el valor del precio residual pactado. No obstante, también puede negociar una ampliación del alquiler o devolver el bien y no optar por la compra.
Esta modalidad está regulada en la Ley 15/1977 y, en un principio, los particulares no tienen acceso a firmar un contrato de este tipo, pues está destinado a empresas y autónomos . Esta es una de las principales diferencias entre el leasing y el renting.
Por otro lado, a diferencia del renting como después veremos, el titular del bien delega en la persona firmante todas las obligaciones de propiedad, tales como el seguro, el mantenimiento, los impuestos y el resto de gastos derivados.
¿Qué es el renting?
El renting, por su parte, es simplemente una forma de alquiler en la que, al finalizar el contrato, no tendrás derecho a la propiedad. No obstante, al igual que en el leasing, se puede pactar una renovación del mismo. En este caso, cualquiera puede firmar contratos de este tipo, tanto particulares, como empresas o autónomos.
En el precio del renting suelen venir incluidos aspectos como el mantenimiento del bien, así como su seguro y los impuestos.
¿En qué se parecen el leasing y el renting?
La única similitud que comparten el leasing y el renting es que ambos son dos formas de alquiler en las que se ofrecen bienes nuevos, que no han sido utilizados con anterioridad.
Duración del contrato. Una de las principales diferencias entre el leasing y el renting
Debido a que, normalmente, el contrato de leasing siempre acaba en compra, suelen ser largos y durar entre 2 y 6 años . El renting, por su parte, tiene una duración menor y no es habitual que supere los 5 años .
No obstante, existe una modalidad de renting llamada “renting flexible” en la que no se establece un compromiso de permanencia y se permite devolver el bien cuando se quiera (sin sufrir penalización) una vez haya pasado el tiempo mínimo.
¿Qué desgrava más el renting o el leasing?
Al ser el leasing una forma de financiación, se pueden obtener deducciones fiscales, pues se considera un gasto de empresa. Por su parte, el renting es una forma de arrendamiento y las facturas son como cualquier factura de alquiler, por lo que se pueden desgravar de las declaraciones trimestrales del IVA y de las declaraciones del IRPF . En las primeras la desgravación puede ser del 50% y en las segundas del 100%. Teniendo en cuenta esto, la opción más rentable dependerá de tu situación como profesional o de tu empresa.
No obstante, ten en cuenta que estas desgravaciones y deducciones solo tendrán lugar si demuestras que el bien es imprescindible para el desarrollo de tu actividad profesional .
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